¿Conoces el Fuerte de Tisavar? Ubicado a las afueras del gran erg, entre Nefzaoua y Remada, este fuerte fue construido durante el reinado del Emperador Cómodo, entre 184 y 187.

Permitía vigilar el camino hacia Dhahar y formaba parte de la frontera romana, los famosos «limes», que también se llamaban «fines», «ripa» o «terminus».

Hoy, Tisavar se llama Ksar Ghilane. Aquí, en medio de una duna secreta, se encuentra uno de los fuertes mejor conservados de esta antigua frontera.

Además, su última ocupación se remonta a la Segunda Guerra Mundial, cuando fue ocupado por los soldados de la famosa columna Leclerc.

Para llegar al fuerte, hay que caminar casi una hora entre las dunas, y de repente, Tisavar aparece frente a ti.
Una dedicatoria a Júpiter se encuentra sobre el umbral de este rectángulo de 30 por 40 metros. Se reconoce un patio rodeado de habitaciones. Escaleras colocadas en las cuatro esquinas del fuerte destacan la existencia de un paseo, que ya no existe.

Mirando la extensión de Dhahar a lo lejos, no puedo evitar pensar en un libro, «El desierto de los tártaros» de Dino Buzzati. También pienso en una película, «Bailando con lobos» de Kevin Kostner.

La noche cae poco a poco. Estoy a punto de pasarla bajo las estrellas. Quizás haya un encuentro mágico con el Principito en la cuna del amanecer.